Tareas Pendientes

Resignificar cada espacio dónde amé,
y dónde ahora amo a otros.

Resignificar los mundos de ensueño
y coronar nuevas musas.

Resignificar el amor,
mi alma empedernida y romántica
La melancolía,
Para que sea solo mía
y por la mera costumbre
no te bese los pies,
ni te alce la mirada con sacra devoción,
ni abrace tu otredad monstruosa,
como quien busca contención en el vacío,
colores en el ocre.

Entre estos fantasmas que me acosan,
deseo disipar la niebla que envenena.

Entre estos fragmentos que también soy yo
deseo remendarlos hasta sentirme completa.

Frente a esta desconocida que me mira desde el espejo,
deseo conciliarme con su singularidad
y amarla con locura.

Con los pulmones llenos de agua salada
ahogada entre silencios taciturnos,
melancólicos y pacientes
deseo conseguir paz,
rebeldía con sabiduría
valor para trazar los límites
garra para tomar la resolución
brío para soltar el basta.

Frente a esta identidad que se me cuela entre los dedos
yaciendo
revolcándome
me refriego obscenamente
sobre todas esas incómodas respuestas
que todavía no tengo
que del otro lado de la frontera me miran dantescas
dame fuerzas para mantenerles desafiante la mirada,
para devolverles su acoso con gozo
y dame amor para responder
y resolución para cuando decidan saltar las certezas
de los marcos de mis labios
dame amor para entender el deseo de la piel que me encarna
dame un corazón más fuerte para soportar sus nuevas aventuras.

Aprender cual es límite para dar la espalda
y que la dignidad no es ofrenda
para inmolar a causas perdidas.

Entender definitivamente que hay personas que no valen la pena,
y frente a todo esto que me hace mal
y no me deja seguir
fortaleza para dejarlo fluir.